Soñando con lo más alto

El pasado

Isaac, ¿cómo fue tu infancia?, ¿qué colores recuerdas?

Fue una infancia feliz, activa y creativa. Los colores que más recuerdo son el azul, el verde y el naranja. Mis padres son exbailarines profesionales de ballet. Éramos once hermanos (yo el séptimo) y estudiábamos en casa. Mi padre empezó a darnos clases de baile: ahí nació mi gusto por el ballet. Literalmente, lo descubrí en cada paso que me iban enseñando.

¿Cuál es la primera imagen que se te viene a la mente relacionada con el ballet?

Tengo una anécdota que siempre recuerdo: un día, durante la práctica, yo me quejé y le dije a mi padre: «Pa’, el piso del patio está totalmente inclinado, aquí no puedo girar». Él me respondió: «es precisamente aquí donde debes aprender a girar, pues el escenario de la Ópera de París es así: totalmente inclinado, domínalo aquí y no batallarás para hacerlo a la perfección». Ese día, en ese momento, nació un sueño: algún día bailar en la Ópera de París. Muchos años después, me convertí en el primer mexicano en ser invitado a bailar un ballet completo en ese escenario.

¿Qué te hizo ser quien eres? ¿Quién encendió la chispa?

Doy crédito a mis padres: tienen una historia de trabajo y amor por lo que hacen. Fueron valientes y visionarios en educarnos de una manera diferente que nos dio la libertad de ser y aprender pese a las circunstancias.

¿Tuviste que superar desafíos, momentos en los que sentías que tu sueño se escapaba de tus manos?

Sufrí una lesión grave en la columna vertebral. El diagnóstico era aterrador: necesitaba cirugía y perdería la flexibilidad de la espalda. Decidí no operarme e hice un tratamiento alternativo que era dolorosísimo, pero mis sueños eran más grandes. Logré recuperarme de manera increíble. Seis meses después competí en Rusia, en lo que se consideran las olimpiadas del ballet. Gané la medalla de oro, era la primera vez que un mexicano participaba. Fue una medalla histórica.

El lema de Porsche es «Driven by Dreams». ¿Sientes que podría representar tu carrera?

Absolutamente, creo que la describe de manera perfecta. Así ha sido toda mi vida: he sido impulsado por mis sueños. ¡Me encanta este mensaje! El viaje ha sido fantástico, siento que he vivido muchas vidas de tantas cosas que he hecho.

El presente

¿Sientes que tu sueño puede inspirar hoy a muchos niños y niñas?

Me ha tocado conocer muchos niños y jóvenes que han sido inspirados por mis sueños. Es una gran responsabilidad para mí, pero también me llena de emoción saber que a través de mi profesión, muchas vidas más se han inspirado. A los niños y a los jóvenes les diría que nunca se rindan, que la vida es para aprender y se aprende todos los días. Que no olviden el valor de la perseverancia. Nada puede darte mayor satisfacción que saber que has hecho tu máximo esfuerzo para lograr algo.

El futuro

Ferry Porsche decía que, como no encontraba el deportivo de sus sueños, entonces tuvo que fabricarlo. ¿También estás fabricando tu próximo sueño?

Así es, día a día, perseveraré hasta lograrlo. Me identifico mucho con esa frase.

¿Cuál es el Porsche con el que sueñas?

Un Porsche 912 verde, ¡es increíble! Aunque me encanta el color Maya Gold Metallic.

¿Qué le dirías hoy a ese niño que fuiste?

No dejes de soñar, lo has hecho bien, sigue así. No olvides el camino que has recorrido y que te ha llevado a cumplir tus sueños.